María Félix y la historia del collar que le regaló Jorge Negrete

El collar de esmeraldas de La Doña es una de sus piezas más legendarias y repleta de secretos. Fue un regalo de bodas de su tercer esposo, Jorge Negrete.
María Flix con bolsa Kelly
María Félix, actriz mexicana. Emilio Ronchini/Mondadori/Getty Images

De María Félix pueden afirmarse muchas cosas, pero hay una de ellas que simplemente no podía ocultar, aunque hubiera querido: Tenía estilo hasta para salir de cualquier inconveniente, desde los problemas más ínfimos, hasta los enredos más glamurosos; porque claro, tratándose de La Doña, uno de sus problemas –que para cualquiera pudo ser bochornoso–, para ella terminó convirtiéndose en una leyenda en forma de joyería con esmeraldas.

La vida de María Félix está plagada de mitos y uno de ellos se encuentra en el collar que recibió como obsequió de parte de Jorge Negrete, su tercer marido, con quien contrajo nupcias en 1952. Su amor fue turbulento, efímero, breve; el actor mexicano falleció poco más de un año después de su matrimonio a causa de hepatitis y tras su partida dejó una historia digna de película (literalmente) que involucró el regalo de bodas para María bonita: un collar de esmeraldas cuya imagen hoy en día es posible encontrar en alguna que otra foto perdida de su propietaria en Internet.

La historia del collar de esmeraldas que Jorge Negrete le regaló a María Félix

La protagonista de El peñón de las ánimas escribió en su autobiografía (dividida en tres partes y titulada ‘María Félix: Todas mis guerras’) la historia detrás de este lujoso accesorio valuado en 300 mil pesos mexicanos, toda una fortuna para aquel entonces. Al fallecer Jorge Negrete, su viuda se enteró de que el actor no había terminado de pagar esta deslumbrante joya. Cuando su hermano, David Negrete, la solicitó de vuelta, con su característica y ácida personalidad, la actriz respondió: ‘Lo dado, dado’ y se negó a entregarlo.

María Félix describió en su autobiografía lo injusto que le parecía tener que devolver su regalo de bodas. Hay quienes nombran a esta pieza ‘la joya más cara del mundo’ y es que entre litigios y disputas legales por su pertenencia, su valor definitivamente se dispara a más de sus iniciales 300 mil pesos. 

La historia del collar que María Félix recibió de parte de Jorge Negrete.

George Karger/Getty Images

Si bien la pareja de actores compartió un fugaz cariño que era ideal por su estatus de grandes estrellas del cine mexicano, a La Doña también se le conoce y se lo conocía muy bien su orgullo, mismo que se descubre entre líneas cuando habla de cómo se resistió a entregar el collar cuando la detuvieron en el aeropuerto para dirigirse hacia París: ‘A principios de 1954 el asunto se puso feo. Había estado en México unas semanas y me tenía que regresar a París. Fui al aeropuerto acompañada de Diego Rivera y de pronto, me paran dos policías con una orden judicial que me impedía salir del país debía permanecer en México hasta que se arreglara el pleito del collar. Ni por esas lo entregué, volví con él a mi casa, lo llevé puesto en muchas reuniones y me tomé muchas fotografías con él. Más tarde, ya casada con Alex Berger, lo pagué de mi propio dinero’. La prensa, según cuenta María, estaba escandalizada.

En aquel entonces, la leyenda de una suntuosa joya obsequiada de parte Jorge Negrete para María Félix era tan popular en el colectivo popular que incluso se planeó hacer una película con un título bastante predecible: Sí, ‘El collar de esmeraldas’, protagonizada por Ana Luisa Pelufo y producida por Guillermo Calderón. El hijo de María Félix, Enrique, le advirtió a su madre, quien presentó su renuencia ante la Asociación Nacional de Actores para detener el proyecto que ya tenía todo listo para comenzar.

¿Qué fue del collar de esmeraldas de María Félix?

María Félix portando su collar de cocodrilos Cartier.

Luego de un gran combate legal en el cual la actriz sonorense desembolsó grandes sumas con tal de no entregar el collar, la disputa concluyó con un fideicomiso dedicado a la hija de Jorge Negrete, Diana Negrete, con el que por fin se hizo dueña absoluta de la pieza. ¿Qué pasó con ella? Si piensas que lo guardó en un sagrado cofre para conservar la memoria de su tercer esposo, te equivocas. En un movimiento muy ‘La Doña’, la artista cuenta en sus memorias que envió a fragmentar las esmeraldas para colocarlas en sus famosos cocodrilos de Cartier. ¿No habrá sido María Félix quien inventó aquella expresión de ‘salirse con la suya’?