El presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, Edgar Elías Azar, ratificó a 14 magistrados e impuso la toga a siete nuevos que fueron propuestos por el jefe de gobierno capitalino y aprobados por la Asamblea Legislativa.

El magistrado resaltó que bajo ninguna circunstancia los poderes judiciales pueden permitir la politización de la jurisdicción, porque "permitirlo es tanto como pervertir a la justicia, desdeñarla y entregar su soberanía a decisiones del partido político mayoritario".

Durante la sesión del pleno dijo que si "somos jueces interamericanos no podemos, por estrecha que sea nuestra circunstancia de cooperación con otros poderes, entregar la soberanía e independencia a entes políticos que no seamos otros que los jueces".

Señaló que cuando en las sociedades se presentan tendencias para politizar a los jueces, para someter a la función jurisdiccional del poder público, cuando se pretende cancelar la independencia del poder judicial, "las cosas no andan bien".

Elías Azar indicó que ningún órgano judicial en el mundo admite algo así y "ningún intento así sería permitido en nuestros escenarios de justicia", aseveró el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia local.

Sobre los nuevos magistrados que asumieron funciones a partir de este martes dijo que si hay alguien inconforme con los nombramientos, en su momento debió manifestarlo, pero "a mí el procedimiento me merece respeto y tenemos que acatar lo que el jefe de gobierno propone y aprueba la Asamblea Legislativa".

En ese sentido reconoció que el Tribunal tiene la facultad de revisar los perfiles de los magistrados, pero en lo relativo a si cumplen con los requisitos que señala la ley como que sean licenciados en derecho, que tengan más de 35 años de edad y más de cinco años en el ejercicio profesional.

Abundó que la ley no establece que el Tribunal puede impugnar sino está de acuerdo con un nombramiento, por lo que solo puede verificar que se cumplan los requisitos que establece la ley.