Animales

Las ranas hembra simulan estar muertas cuando no quieren aparearse

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Un vecino de Ibi estalla contra el "ritual de apareamiento" de sus vecinos: "Se escucha absolutamente todo"

Una rana

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Los animales tienen sus propios rituales de apareamiento, y el macho casi siempre gana por la fuerza. Esta es la conclusión de un estudio del Museo de Historia Natural de Berlín, en el que han revelado que las ranas hembras hacen de todo por librarse de las relaciones sexuales, incluso simulan su muerte.

"Anteriormente se pensaba que las mujeres no podían elegir ni defenderse de esta coerción masculina", afirma la doctora Carolin Dittrich, primera autora del estudio del Museo de Historia Natural de Berlín, en The Guardian.

En el estudio, incluyeron a 54 ranas hembras. Metieron en una caja a un macho con dos de ellas, una grande y otra más pequeña para poder observar si había diferencias. Casi la mitad, evitaron el apareamiento. "La demostración de un comportamiento de evitación de pareja resultó en la fuga de 25 hembras", explica la autora.

Las hembras que simulaban su muerte eran las pequeñas. Según los investigadores, es una respuesta del cuerpo al estrés, que es mayor en el caso de las más jóvenes. Aunque en la realidad, el resultado podría ser diferente. "En el mundo real a menudo observamos la formación de bolas de apareamiento, pero también que las hembras pueden alejarse más fácilmente porque hay más estructuras y lugares para esconderse", asegura Dittrich.