El pasado viernes, en la ciudad filipina de Banguio, el malagueño José Antonio Campos Calle, de 28 años, se alzó como el primer español en conseguir la corona de Mister Internacional. Un conocido certamen de belleza que se realiza desde 2006. De acuerdo con el andaluz -que también consiguió los títulos de Mister Fotogenia, Mejor Cuerpo en Traje de Baño y Mister DermaWorld-, su mundo ha cambiado en cuestión horas. Y está más feliz que nunca.
"Los últimos tres días han sido una locura. Volví a España este lunes e, inmediatamente, me tocó ir a TardeAR, el programa de Ana Rosa... Así que aun no me ha dado tiempo a asimilar todo lo que he conseguido. Bueno, lo que hemos conseguido España, Mister International Málaga y yo. Porque ha sido un trabajo en conjunto. Estoy ilusionado y espero con felicidad todo lo que viene", comenta a La Otra Crónica.
Para llegar a Filipinas, Campos Calle debió recorrer un largo camino. Sin embargo, según sus palabras, todo ha valido la pena. "Primero, yo me presenté a Mister International Málaga, gané y fui al certamen nacional, donde quedé en el segundo lugar. Antonio Company, que se llevó la corona, irá a Mister Mundo y yo fui a Mister International. Llegué dos semanas antes a Filipinas y me lo pasé muy bien" explica para luego hablar sobre sus primeros días en el Banguio.
"Al llegar, vi que sí tenía competencia. Aun así, yo confiaba en quedar por arriba. Aunque jamás imaginé que yo podía ganar. Cuando decían 'Spain', yo no me lo creía. Miraba a mis compañeros, como diciendo '¿de verdad soy yo?' y ellos me decía 'sí, sal, sal, que te ha tocado'", confiesa, entre risas.
Y es que el español aun no logra "digerir" que hoy sea catalogado como uno de los hombres más guapos del mundo. "No sé si lo soy, porque la belleza es subjetiva. Y hoy el hombre que gana estos certámenes de belleza no es necesariamente el más guapo. Lo que se necesita para ganar estos concursos es intentar transmitir valores a la sociedad, abogar por causas sociales. Puedes tener una cara bonita, pero ese rostro solo te va a ayudar a dar visibilidad a lo que realmente quieres", afirma, con humildad.
De acuerdo con José, hasta ahora, el ego no se le ha disparado. Y si le ocurre, está preparado para combatir el narcisismo. "Creo que estoy rodeado que personas que me van a ayudar. A mi familia siempre le he dicho 'por favor, si se me sube o lo que sea, me bajáis'. Yo quiero tener los pies en la tierra. O, como se dice, quiero tener las piernas en el suelo y la cabeza encima de los hombros", asevera.
¿Y qué se viene para Mister International en los próximos meses? Según el propio rey de belleza, pasará algunos meses fuera de casa. "Este certamen tiene la intención de inspirar a las siguientes generaciones, así que las labores de un mister son viajar de país en país y trabajar por diversas causas sociales. Si no me equivoco, primero visitaremos India y luego Perú, Myanmar y Sudáfrica. La idea es ayudar a que los jóvenes tengan un futuro mejor", menciona.
"Personalmente, lo que a mí me interesa es intentar dar visibilidad a la dislexia. La dificultad del aprendizaje a nivel lector, porque los jóvenes de hoy en día, a lo mejor, no tienen ese respaldo en la educación. Mucha gente se decanta por luchar contra el cáncer u otras enfermedades. Pero yo quiero trabajar con la educación, que es algo que me parece muy importante. Es el futuro de los niños, pero también su presente", señala.
Nuestro nuevo mister está 100% enfocado en su labor humanitaria. Pese a ello, también quiere dejar en claro que no dejará su verdadero trabajo. "Yo soy militar y no tengo intenciones de dejar el ejército. Yo creo que hay que seguir comiendo y, por ahora, lo que me da de comer es mi trabajo. Así que seguiré en Valencia. Estoy muy agradecido de mis jefes y mis compañeros. Me concedieron una licencia para poder viajar a Filipinas y todos me han apoyado muchísimo", manifiesta.
De acuerdo con Campos Calle, él se siente muy orgulloso del ejército y, por supuesto, muy orgulloso de que la Princesa Leonor se esté formando en la Academia Militar, en Zaragoza. Es más, describe la presencia de la heredera de Felipe VI como "una alegría". "Es increíble verla allí. Es una persona magnífica y ojala le vaya genial. Además, es muy guapa", concluye.