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Decora tu Navidad con color y tradición: 25 ideas en rojo, blanco y dorado
Las tendencias en decoración navideña se rinden a los colores tradicionales: rojo, dorado y blanco.
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Blanco, oro y rojo. Estos tres colores navideños por antonomasia son la gran tendencia para decorar las fiestas de este año. Un trío cromático muy tradicional y que se utiliza en casi todos los espacios que quieran transmitir la magia de estas fechas: escaparates, tiendas, restaurantes y, por supuesto, nuestras casas. Esos tres colores evocan la Navidad, además del color verde conífera por una razón evidente: es el color del árbol de Navidad.
Un trío cromático con mucha historia
Pero, por qué el rojo y el blanco se consideran navideños. Los historiadores no saben a ciencia cierta el origen de esta tradición. Existen muchas teorías, desde las que enlazan con ceremonias paganas a las que relacionan el color rojo con las raíces cristianas y el color de la sangre de Cristo. Puede que en la época medieval, cuando existen evidencias de utilizar el rojo y el blanco para las pinturas de Navidad, fueran los pigmentos más fáciles de conseguir... O en la época victoriana, cuando parece que rojo, blanco y dorado, junto con el verde; se extendieron y popularizaron como base para la decoración de Navidad. Lo que parece más plausible es que la costumbre de decorar las casa en tonos rojos en invierno tenga una fácil explicación: frutos silvestres, acebo, flor de pascua... Florecen en estos meses y son ¡rojos!
El blanco, símbolo del invierno
El blanco parece más fácil de entender, puesto que unas Navidades blancas simbolizan la época del año y muchas de las tendencias en decoración navideña vienen de los países nórdicos y allí, evidentemente, la Navidad es nieve, escarcha, hielo y su color blanco. Quizá eso fue lo que valoraron los publicistas de Coca Cola cuando, en los años 20, decidieron vestir a San Nicolás/Santa Claus con el ya famoso traje rojo ribeteado en piel blanca.
¿Y el dorado? Brillos para una época llena de magia
Aparte del "oro, incienso y mirra" que llevaban los Reyes Magos al Niño Jesús, hay muchas razones por las cuales el color dorado no puede faltar en una decoración navideña. Evoca lujo, riqueza, fiesta... y eso es que lo que buscamos a la hora de evocar una época tan especial. Si queremos que sea una celebración en toda regla debemos engalanar nuestra casa y nuestras mesas. Brillos metalizados, muchas luces, guirnaldas, velas...
Apuesta por una Navidad única y exclusiva e inspírate en la tradición: viste tus fiestas navideñas con detalles en rojo, blanco y dorado para seguir fiel a la tradición.
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