¿Sabías que la Torre Eiffel es 15 centímetros más alta en verano que en invierno?

La Torre Eiffel es el símbolo de París y es uno de los lugares más visitados del mundo junto con el Machu Picchu en Perú, la Alhambra en España, la Acrópolis de Atenas o Petra en Jordania, según recoge Skyscanner. 

Hablando en cifras, la Torre Eiffel está compuesta de 18.038 piezas de hierro, tiene un peso de 10.100 toneladas, hay que subir 1.665 escalones y su construcción costó 7.799.401,31 francos de la época, ha comentado National Geographic. 

Esta construcción fue diseñada por Gustav Eiffel con motivo de la Exposición Universal de 1889 y se esperaba que se desmontase después, pero ya es el signo de identidad del skyline parisino. La Torre Eiffel ha sido el edificio más alto del mundo durante 41 años hasta la construcción del Empire State Building.

La altura de la Torre Eiffel ha generado curiosidad recientemente debido a sus aparentes variaciones debido a los cambios de temperatura. La torre, al estar construida de hierro, varía su altura unos quince centímetros al año debido a la dilatación del material.

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Los estudios han demostrado que la Torre Eiffel tiene un coeficiente de dilatación alto, lo que explica que gane algunos centímetros en verano debido a las elevadas temperaturas. En cambio, en invierno se contrae y vuelve a su altura original.

El contraste térmico tiene otro impacto en este monumento turístico: el calor provoca que la Torre se incline ligeramente hacia el lado opuesto al sol, ha asegurado la web oficial de la Torre Eiffel. De hecho, el sol solo incide directamente en uno de los lados, lo que crea un desequilibrio con los otros tres, que permanecen estables. La Torre Eiffel se inclina ligeramente en verano, aunque es imperceptible al ojo humano.