Conectarse a la red eléctrica es un proceso que se puede hacer por medio del famoso “diablito”, sin embargo, al hacerlo, se está cometiendo un delito federal y a continuación te decimos cuáles podrían son sus consecuencias legales.
Te recomendamos: AMLO rechaza que Reforma Energética disparará precio de luz y emisiones de CO2 como alerta EEUU
Colocar un “diablito” es alterar los medidores de luz para evitar que el recibo de este servicio sea elevado y pueden hacerse de diferentes materiales que se colocan dentro de la caja de fusibles.
Pese a que es una práctica común, el colocar “diablitos” es considerado un delito. De acuerdo al artículo 254, apartado XI, del Código Penal Federal se sancionará a:
“Quien sin derecho realice cualquier sustracción o alteración de equipos o instalaciones del servicio público de energía eléctrica”.
Por su parte, las sanciones por robarse la luz o alterar los aparatos de energía eléctrica federal se aplicarán con base en lo establecido en el artículo 253, el cual señala que el castigo será de tres a diez años de prisión y de 200 a mil días de multa.
En caso de que el delito sea realizado por un trabajador o servidor público, las penas aumentarán en una mitad más a los ya mencionados.
El uso de “diablito”, además de ser un delito, es también riesgoso, pues la CFE señala que las conexiones irregulares pueden causar accidentes mortales, provocar cortos circuitos e incendios y dañar los aparatos eléctricos debido a las variaciones de voltaje.
Debido a las razones mencionadas, la CFE pide a los ciudadanos cuidar de su seguridad y su familia.
