Los cuadernos de papel no pasan de moda
Texto: Nicolás Pili
En un mundo cada vez más digitalizado, con más facilidades gracias a la tecnología, ¿hay lugar para los tradicionales cuadernos de papel? Los que por años fueron el único soporte posible para nuestros apuntes, bien podrían ser reemplazados por laptops, tablets, smarthphones… Sin embargo, hay quienes sostienen que más allá del valor nostálgico, escribir a mano tiene beneficios propios.
Escribir en un cuaderno sigue siendo útil y necesario. Foto: Thinkstock
Analógico vs. digital
Dueño de cientos de ellos, el periodista Eric Weiner confesó ser un fanático de los cuadernos, en una nota en el sitio de la Radio Pública Nacional (NPR, por sus siglas en inglés). Ante la duda de si él era una excepción a las costumbres actuales, se acercó a una cafetería para encontrarse con que, efectivamente, todos estaban con sus computadoras, tabletas y teléfonos inteligentes. Pero, también notó algunas libretas y cuadernillos. Al preguntarles a estas personas por qué insistían en escribir a la vieja usanza, algunos señalaron, por ejemplo, que trabajaban en soporte digital, pero otras cuestiones más personales, como la escritura creativa de cuentos o pensamientos, preferían hacerlas en papel.
Otro de los hallazgos de Weiner fue observar muchas libretas pequeñas, del tipo que utilizaba Hemingway. Las tradicionales Moleskine registraron un aumento de ventas en los últimos años, comparable con la venta de smartphones. El CEO de la compañía de cuadernos, Arrigo Berni, le comentó al periodista: “Se trata de personas en las que conviven las dos partes, la digital y la analógica”. Y agregó: “Todavía tienen la necesidad de una experiencia física y emocional que los dispositivos digitales no permiten”.
Mejores resultados
La investigadora de la Universidad de Princeton, Pam A. Mueller, realizó un trabajo publicado el año pasado en la revista científica Psychological Science, sobre las ventajas académicas de aquellos estudiantes que durante las clases tomaban apuntes a mano, en contraste con aquellos que registraban todo en sus computadoras.
El estudio reveló que los alumnos que usaban sus laptops para apuntar notas, tenían un rendimiento inferior que el de aquellos que recurrían a cuadernos de papel. La escritura virtual podría implicar un procesamiento más superficial de la información y, en consecuencia, peor sería el resultado ante preguntas conceptuales, plantea Mueller.
Por su parte, la terapista ocupacional, Suzanne Baruch Asherson, agrega desde una columna en el periódico The New York Times que en estos tiempos en los cuales los correos electrónicos y mensajes de texto predominan, la escritura en cursiva o manuscrita sobre papel estimula la comprensión y la sincronización entre los hemisferios cerebrales, de una manera que no ocurre ni tecleando, ni escribiendo en imprenta. Asherson cita como fuente a la organización encargada de tomar las pruebas SAT, que pudo notar que los estudiantes que escribían sus ensayos en letra cursiva, obtenían resultados ligeramente mejores que aquellos que lo hacían en imprenta.
Así que, ya lo saben, continúen utilizando sus cuadernos y apuntando notas en ellos en cursiva, sobre todo al estudiar. ¡Los resultados podrían ser mejores!
