El sector siderúrgico mexicano reconoce y agradece al gobierno federal y en particular a la Secretaría de Economía por la publicación del decreto de aranceles “Nación más Favorecida”, el cual generará condiciones de competencia entre el acero nacional y el acero proveniente de países con los que México no cuenta con tratados de libre comercio.
En un texto emitido por la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (CANACERO), se argumentó que la decisión de fortalecer la planta productiva nacional mediante el decreto es congruente con el interés del Gobierno Federal de promover la integración de las cadenas de valor, el intercambio intrarregional, la industrialización y la generación de empleos. Además que permite consolidar una política industrial que vele por el desarrollo y bienestar de México y de sus principales aliados comerciales en el marco del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y mejorar las condiciones de México dentro del Tratado.
México es el decimocuarto productor a nivel mundial de acero y el segundo de América Latina; el sector siderúrgico mexicano emplea a cerca de 700,000 personas incluyendo los empleos indirectos, ofrece los salarios más altos de la industria manufacturera y tiene capacidad de exportación a 169 países. En los últimos tres años, la industria del acero en México realizó inversiones por más de 3,580 millones de dólares, además se esperan inversiones por 4,200 millones de dólares, lo cual favorece la sustitución de importaciones y el fortalecimiento de la producción nacional.
Ante este panorama, en entrevista para Mexico Industry, Juan Antonio Reboulen, presidente de la Comisión de Comunicación y Vinculación Política y de la Comisión de Aduanas de CANACERO, indicó que para el sector siderúrgico, esta es una batalla que han venido dando hace muchos años por una política industrial en México.
“Creemos que es una medida orientada y correcta en materia de política industrial porque viene a hacer justicia contra competidores que desde hace muchos años participan en el mercado mexicano y no en igualdad de condiciones, es decir, tienen atrás subsidios no permitidos por las economías del mercado y una cantidad de subvenciones que destruyen los mercados extranjeros. En el sector específico del acero, tenemos en cuenta que el principal problema que enfrentamos es la sobrecapacidad instalada de acero en el mundo que se da por el intervencionismo del estado chino en la economía de su país, donde han llegado, en menos de 15 años, ha instalar la capacidad para suministrar el consumo total del mundo”.
Esto con base en que hoy en día, existe una sobrecapacidad de 700 millones de toneladas de acero y no instaladas por efecto de la demanda a nivel mundial. El hecho de que existan esas cantidades de toneladas y fluyan a los mercados abiertos, como México, a precios inferiores al costo de la materia prima, es desleal, contra el cual se combate.
Asimismo, Reboulen comentó que Estados Unidos, la economía más poderosa del mundo, tuvo que imponer por razones de seguridad nacional, una tasa arancelaria del 25% a las importaciones de acero, y hoy lo que México está haciendo es poner una tasa homologada.
“Vamos en el mismo sentido que ellos, México se tardó algunos años en homologarlo pero finalmente estamos en el mismo nivel. Esto lejos de ser una medida proteccionista, es medida de defensa y justicia a la industria de Norteamérica. México es un mercado abierto al mundo, tenemos tratados comerciales que le permiten la entrada libre de acero a más de 50 países exportadores. Además, el país ha venido invirtiendo cantidades importantes en la ampliación de sus capacidades productivas, sobre todo en aceros planos, y hoy, hay capacidad para surtir la demanda de aceros especiales”.
Resaltó que uno de los méritos de esta medida, es que no solo defiende productos elaborados por la grandes siderúrgicas, sino que también incluye a medianas y pequeñas empresas que son manufactureras y que estaban empezando sufrir los estragos de oleadas de importaciones de productos terminados a precios de materia prima.
“Aprovecho para recalcar que uno de los verdaderos alcances de esta medida es que le envía un mensaje a Estados Unidos de que México avanza en el mismo sentido que ellos, con la idea de hacer de América del Norte, la región más competitiva en la manufactura del mundo; cuidándonos y blindando nuestros mercados de importaciones desleales, tal y como lo hicieron ellos con la 232 y 301, medidas orientadas a restringir importaciones desleales. Y también, se envía una señal a las industrias nacionales para que continúen con la inversión, elevando la competitividad, para lograr que los beneficios del nearshoring se queden en México y generen empleos en el país, no en Asia”.
Por último, Juan Antonio Reboulen, envió un mensaje a los industriales para trabajar de la mano del gobierno y la academia, en complementar este tipo de medidas con una estrategia de desarrollo industrial integral que los lleve a recuperar la manufactura de valor agregado que se ha ido perdiendo en el país.
“Con estas medidas se genera el espacio propicio para poder hacer manufactura de valor agregado, y poder lograr que los beneficios de la nueva era de inversiones beneficien más a las economías y crezcamos a las tasas que siempre hemos deseado”, finalizó.
