¿Cómo el orgasmo afecta tu cuerpo y mente durante los 60 minutos posteriores?

Descubre qué le sucede a tu cuerpo desde el momento en que se produce el orgasmo hasta 60 minutos después. (Getty Images)
Descubre qué le sucede a tu cuerpo desde el momento en que se produce el orgasmo hasta 60 minutos después. (Getty Images)

Los beneficios del orgasmo son ampliamente conocidos: puede aliviar el estrés, ayudarte a dormir e incluso estimular el sistema inmunitario.

Sin embargo, pocos conocemos exactamente lo que nos sucede mental y físicamente después de alcanzar el clímax.

En realidad, en nuestro interior ocurren muchas más cosas de las que percibimos puesto que nuestro cuerpo sigue experimentando los efectos del orgasmo incluso 60 minutos más tarde.

Desde el momento del orgasmo se producen muchos cambios químicos, fisiológicos y psicológicos.

Al subidón inmediato le puede seguir la disforia postcoital. (Getty Images)
Al subidón inmediato le puede seguir la disforia postcoital. (Getty Images)

Los expertos en juguetes sexuales Beddibledesglosan cómo el orgasmo afecta a una persona, minuto a minuto.

0 minutos después de un orgasmo

Tras alcanzar un orgasmo, una poderosa ola de dopamina inunda el cerebro generando un subidón similar a la euforia que produce el consumo de heroína.

10 minutos después de un orgasmo

Algunas personas desarrollan la disforia postcoital con bastante rapidez después del orgasmo experimentando sentimientos repentinos de depresión y agitación que son el resultado de la caída de los niveles de dopamina.

30 minutos después de un orgasmo

La presión arterial y la frecuencia cardíaca vuelven a la normalidad y se pueden experimentar calambres en los músculos del pene o la vagina debido a sus intensas contracciones.

40 minutos después de un orgasmo

Es común que 40 minutos después aparezca cierta somnolencia debido al ejercicio físico realizado para alcanzar el orgasmo y el agotamiento mental que se produce con el aumento y la caída de los niveles de dopamina.

60 minutos después de un orgasmo

Aunque cada hombre es diferente, algunos tardarán más de una hora en recuperarse después del orgasmo, un fenómeno que se conoce como período refractario. En cambio, las mujeres suelen recuperarse más rápido.

Otra investigación también descubrió que los gemidos no forman parte del orgasmo femenino. (Getty Images)
Otra investigación también descubrió que los gemidos no forman parte del orgasmo femenino. (Getty Images)

En términos de excitación sexual, el NHS divide el proceso de placer para hombres y mujeres, especialmente para estas últimas, en cuatro fases: excitación, meseta, orgasmo y resolución.

Sin embargo, lo que sucede en el cuerpo masculino y femenino durante la etapa del orgasmo es ligeramente diferente. Estos son los detalles:

El orgasmo en las mujeres

  • El orgasmo es una liberación intensa y placentera de la tensión sexual que se ha acumulado en las primeras etapas (ya sea durante el sexo, la masturbación, etc.). Implica contracciones (los músculos se tensan y relajan con 0,8 segundos de diferencia) de los músculos genitales.

  • La mayoría de las mujeres no experimentan el “período de recuperación” típico de los hombres después de un orgasmo, de manera que pueden tener otro orgasmo si vuelven a recibir estimulación.

  • No todas las mujeres alcanzan el orgasmo cada vez que mantienen relaciones sexuales. En la mayoría de los casos, los juegos previos desempeñan un papel importante para alcanzar el clímax, lo cual incluye acariciar algunas partes del cuerpo y estimular el clítoris.

En el caso de la “etapa tres: orgasmo y eyaculación” en los hombres, dicha fuente señala:

El orgasmo en los hombres

  • Una serie de contracciones envían el semen a la uretra, un tubo en el pene por el que salen la orina y el semen.

  • Esas contracciones se producen en los músculos del suelo pélvico (que sostienen el intestino y la vejiga), en el tubo que transporta los espermatozoides desde los testículos hasta el pene.

  • También ocurren en las vesículas seminales (glándulas que producen fluidos) y la glándula prostática (una glándula pequeña ubicada en la pelvis, entre el pene y la vejiga), que añaden líquido a los espermatozoides. Esa mezcla de espermatozoides (5 %) y fluido (95 %) se denomina semen.

  • Esas contracciones forman parte del orgasmo, por lo que el hombre puede llegar a un punto en el que no logra detener la eyaculación.

  • Las contracciones de la glándula prostática y los músculos del piso pélvico conducen a la eyaculación, momento en el que el semen sale del pene.

El incomprendido orgasmo femenino

La investigación del verano pasado también concluyó que los “gemidos” no forman parte del orgasmo femenino y deben eliminarse del análisis del clímax de las mujeres.

El estudio aplicó un cuestionario a las mujeres pre, peri y post menopáusicaspara conocer sus experiencias orgásmicas en solitario y con pareja.

Las preguntas se basaron en la Escala de Calificación del Orgasmo (ORS, por sus siglas en inglés) y las Sensaciones Corporales del Orgasmo (BSOS, por sus siglas en inglés) que se usan comúnmente en las investigaciones científicas.

La escala BSOS incluye elementos descriptivos como “respiración más rápida”, “espasmos en las extremidades inferiores”, “hormigueo facial”, “sudoración” y “aumento de la frecuencia cardíaca”.

Aunque los investigadores de la Universidad de Ottawa encontraron que las sensaciones corporales estaban presentes en ambas escalas, incluida la “respiración entrecortada/superficial”, el “aumento de la presión arterial” y los “sofocos”, recomendaron eliminar las “vocalizaciones copulatorias” (gemidos) de la escala BSOS.

Básicamente, eso significa que puedes controlar en cierta medida los gemidos, aunque no te des cuenta.

Hannah Millington